El pensamiento y, sobre todo, la acción ambientalista son atacados constantemente tanto desde el crudo capitalismo, como desde la lógica más izquierdosa. Sin embargo el sabotaje más álgido al esfuerzo de esta nueva mirada sobre el mundo y la humanidad proviene desde adentro: dice Augusto Ángel que el ambientalismo es la capa verde que cubre todas las vergüenzas, esta serie de artículos hace una revisión interesante del proceso del Movimiento Ambientalista mundial y la forma en que el establecimiento capitalista ha actuado para cooptarlo. Aunque me parece que tiene un incómodo toque de chauvinismo francés y, aun más grave, un enorme desprecio por los nuevos caminos de aproximación al saber, que la preocupación ambiental ha conectado; crítica, por cierto en la que se encuentran los extremos ideológicos (de derecha e izquierda) cuando se habla de ambientalismo…
Hay algunas cosas muy interesantes en este artículo aunque no sea tan preciso como quisiera….